La cochinilla pone a los chumbos en la cuerda floja
Un vecino hace una figura de alambre buscando concienciación
Guillermo Mirón [ 08/10/2013 – 05:00 ]
La permanencia del actual paisaje del Valle del Almanzora y del Levante almeriense pende de un hilo. O mejor dicho, de un alambre. La plaga de la cochinilla roja sigue imparable adentrándose en el Almanzora y el interior de la provincia exterminando gran parte de las chumberas que encuentra a su paso.
Tras las primeras voces de alarma dadas durante esta primavera y verano por algunos ayuntamientos y asociaciones ecologistas, la cochinilla del carmín ha continuando tiñendo de blanco las palas y cambiando así el paisaje que ha acompañado a los vecinos de estas comarcas en su día a día desde hace décadas.
Reivindicación
José Antonio Martínez, miembro de Ecologistas en Acción Almanzora, ya advirtió meses atrás del peligro que esta plaga originada en el Levante español podía suponer.
Ahora, ha elaborado una escultura artística de alambre que muestra una figura mitad hombre funámbulo, mitad chumbo que intenta mantener el equilibrio para no caer al vacío. Una metáfora de la situación que vive esta planta en el Valle. “Se ha acabado el paraíso de los chumbos y de la planta que da alimento sin recibir nada a cambio”, reconoce.
La obra se encuentra junto a su hogar en Albox, en un margen de la carretera del Saliente a su paso por el Llano de los Olleres y ha sido construida con más de 500 metros de alambre. “El Chumberámbulo –como lo ha bautizado su autor- representa la difícil situación en la que se encuentra esta especie vegetal, y pretende homenajearla para animar a todo el que lo vea a hacer un esfuerzo por conservar en nuestros paisajes rurales una planta tan generosa como ésta, que nos ha proporcionado alimento y protección durante tanto tiempo”, explica este vecino del Llano de los Olleres.
Erradicación
La Delegación de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente ofrece asesoramiento para combatir esta plaga. Desde la Administración andaluza se recomienda a quienes se vean afectados por este problema que se dirijan a los téticos de la Delegación Territorial o bien de las Oficinas Comarcales Agrarias (OCA).
Dependiendo del tipo de infección se aplicará el tratamiento correspondiente, aunque hasta el momento el verde continúa siendo sustituido por el blanco a un ritmo que preocupa cada vez más.